Adolescentes, familia, emociones
y
sugerencias.
Siendo la adolescencia una etapa muy importante del desarrollo humano, tanto desde lo físico, como desde lo psicológico, se hace imprescindible en estos tiempos, conocer cómo acompañar sus procesos tanto por parte de las familias, cómo de las instituciones educativas en las que aprenden. Reconocer sus emociones e identificar las causas que las provocan, les irá permitiendo transitarlas de maneras más beneficiosas para su desarrollo integral. positivas y, además, identificar qué acciones las propician, permite que puedan vivirlas de manera frecuente.
La adolescencia es el proceso de maduración cerebral y de la
complejidad del control de impulso. “La mente en esta etapa se encuentra
aprendiendo de límites, además de que está construyendo su propio sentido de
identidad, todo esto, mientras está rodeado de cientos de estímulos
simultáneamente”, explicó la psicóloga Mtra. Elisa González, del Departamento
Psicopedagógico de CETYS Universidad Campus Mexicali.
Las emociones son respuestas naturales que las personas
manifiestan ante lo que ocurre a su alrededor y tienen como función principal
la adaptación al entorno.
La Dra. Bárbara Fredrickson, ha sido la principal exponente en
este tema, dijo la Experta CETYS, ella ha identificado 10 emociones positivas
principales para el desarrollo del bienestar: el gozo, la gratitud, la
serenidad, el interés por el mundo, la esperanza, el orgullo, la diversión, la
inspiración, el asombro y el amor. Fredrickson ha descubierto en sus
investigaciones que estas emociones promueven acciones, ideas y vínculos
sociales nuevos, además de que incrementan la creatividad, lo cual puede potencializar
un mejor rendimiento académico.
Algunas sugerencias para el acompañamiento.
Ante una situación difícil lo mejor es comenzar con la escucha
activa, que implica hacerlo con plena conciencia e interés sobre lo que se está
diciendo. Una vez que escuchados activamente, se sugiere enfocar la
conversación en aquellos momentos en los que el adolescente ha logrado salir
adelante de otro momento complejo, eso ayudará a que identifique sus recursos y
fortalezas. Una vez que se hayan identificado, será posible trazar un plan para
llegar al objetivo que se requiera.
Si lo anterior resulta muy retador, se sugiere la técnica QPR
(por sus siglas en inglés: (Question, Persuade, Refer) de Paul Quinet, la cual
implica: preguntar sobre la situación, escuchar activamente para poder ayudar a
la persona a ver la importancia de buscar ayuda con un profesional y por último
canalizarlo al apoyo. Esta técnica suele utilizarse en situaciones de ideación
suicida o malestar emocional grave.
Otra técnica es la del diario de agradecimiento,
que favorece el desarrollo del optimismo, lo cual resulta de gran ayuda para
mejorar la percepción y resolución de problemas (no es lo mismo enfrentar un
problema visto objetivamente, a uno que está lleno de distorsiones mentales
como el catastrofismo)
En síntesis: es importante acompañar a los adolescentes a detenerse e
identificar la emoción que están sintiendo, pensar en la situación que la provocó,
y accionar posteriormente según un plan reflexionado.
Identificar un adulto
de confianza en la adolescencia es esencial como una red de apoyo que pueda
guiar adecuadamente ante momentos complejos.